
Me gustan tus negros ojos
también me gustan tus cejas,
arqueadas y disparejas
presagio de tus antojos.
Me gustan sí, tus arrojos
de cabalgar a horcajadas,
con toda la piel mojada
a la luz de tus quejidos,
formando un sólo tejido
con la pasión bien forjada.
Gabriel Flores Rivera
también me gustan tus cejas,
arqueadas y disparejas
presagio de tus antojos.
Me gustan sí, tus arrojos
de cabalgar a horcajadas,
con toda la piel mojada
a la luz de tus quejidos,
formando un sólo tejido
con la pasión bien forjada.
Gabriel Flores Rivera